Los 35 sindicalistas del PAME, que fueron llevados a juicio el 20 de diciembre, fueron declarados inocentes. En el tribunal se refutaron completamente las acusaciones montadas en su contra por parte del gobierno, cuyo objetivo verdadero fue la criminalización de la actividad sindical y la intimidación de los trabajadores. A la hora del juicio, el edificio estaba lleno de trabajadores y sindicalistas reunidos para expresar su solidaridad.
Los cuadros del PAME fueron acusados por “perturbar la paz de los servicios públicos” en el marco de una movilización organizada por Federaciones y Sindicatos el 30 de enero de 2013 en el Ministerio de Trabajo para protestar por los comentarios provocativos del ministro de Trabajo, Giannis Vroutsis, que dijo que el sistema de seguridad social “fue basado en el favoritismo y el clientelismo”.
El gobierno entonces intentó montar una provocación y acusar a los sindicalistas de causar daños a la oficina del ministro. Por esta razón, muchas horas después de la detención de los sindicalistas por las fuerzas de represión que invadieron el edificio, el Ministerio de Trabajo dio a la publicidad fotografías con los daños que supuestamente ocurrieron durante la protesta del PAME. Como se ha demostrado por las fotografías se produjo un movimiento gradual de los muebles en la oficina del ministro que tuvo lugar muchas horas después de que se fueron los sindicalistas del edificio.
Durante el procedimiento de audiencia ayer incluso los testigos de la fiscalía –un secretario y empleados del ministerio- no confirmaron en lo más mínimo las acusaciones contra los cuadros del PAME. Esto fue subrayado enfáticamente por los abogados que defendieron los cuadros del movimiento de clase.
Aggelos Vretos, el abogado de los sindicalistas, tras el fin del juicio, dijo que: “A través del procedimiento de audiencia y de todos los testigos, incluso de los del ministerio, los cargos falsos fueron derrocados completamente y de manera triunfante y se demostró claramente que el juicio tenía características y elementos políticos con el fin de atacar a los trabajadores que realmente están resistiendo”.
El veredicto que les declaró inocentes fue recibido con aplausos y consignas por los reunidos fuera del edificio 2 de los tribunales. Giorgos Perros, miembro del Secretariado Ejecutivo del PAME y uno de los 35 acusados, tomó la palabra y dijo:
“En primer lugar queremos agradecer a los luchadores y los compañeros del movimiento militante de los abogados que estaban a nuestra lado desde el primer hasta el último momento. Los que estaban dentro, y los que habrían sido informados, saben que incluso en el tribunal las acusaciones fueron derrocadas, tal como dijo una camarada abogado, de manera triunfante.
Pero no nos centremos en esto. Queremos señalar una cosa básica: el curso de la lucha de clases no se va a detener, por muchos obstáculos que pongan. No se detiene por muchos que arrastren a los tribunales. No se detiene por muchas convicciones que impongan al movimiento de clase. No se detiene; no se ha detenido hace décadas a pesar de los medios que han utilizado. Nuestra respuesta a la doctrina “ley y orden” del gobierno es que “ley es lo que es justo para los trabajadores, no lo que sirve las ganancias de los capitalistas”.
Consideramos que la participación de masas, la solidaridad expresada durante todo este período, y que debe seguir, ha ayudado al resultado de hoy. Todavía hay muchos juicios pendientes en todo el país a expensas de sindicatos clasistas, los cuadros y los trabajadores. En los juicios iremos de esta manera, es decir con solidaridad, participación, con determinación, con espíritu militante. Este es el camino trazado para nosotros por los trabajadores; tenemos gran responsabilidad hacia ellos y no debemos retroceder ni por un momento.
Al salir de aquí, creemos que debemos ir a la gente con que estamos todos los días, hay que encontrar a nuestros hermanos, a los trabajadores. Este es nuestro apoyo. Son nuestro escudo contra la represión estatal y la intimidación patronal. Así que debemos trabajar con los obreros. Esta es nuestra vida, esta es la vida de nuestros sindicatos, esta es la vida de nuestro movimiento.
Por delante tenemos frentes de lucha muy graves. El frente de la sanidad, el frente de los convenios colectivos, el gran frente del desempleo. Además, tenemos la cuestión importante de la seguridad social, por la que estamos hoy aquí. Continuaremos. Organizamos nuestra lucha. Tenemos muchas actividades por delante. Los sindicatos tienen mucho trabajo que hacer.
Ya que son las fiestas, queremos estar junto con nuestros compañeros de trabajo y los desempleados no de manera típica sino esencial. Hay que reclamar demandas para ellos, hacer intervenciones en el gobierno, para poder llevarse la vida. Hay que apoyar a los desempleados. El derecho al trabajo nos concierne a todos. Todo ello concierne a la nueva generación, a nuestros hijos. Tenemos una obligación ante ellos. ¡Adelante, a luchar con fuerza y combatividad! Y como dicen las letras de una canción: “no esperen que nos inclinemos ni siquiera un momento”.